Las estrellas de la NBA siguen organizando partidos de
exhibición mientras sindicato y propietarios discuten el futuro de la
NBA. Durant y Griffin convocan a LeBron, Carmelo y Chris Paul.
El lockout ha paralizado la NBA, pero no el baloncesto en Estados Unidos. Al menos esa es la intención de las estrellas de la Liga, que siguen organizando partidos de exhibición por todo el país con el fin de mantenerse en forma y de agradecer a los aficionados su paciencia y su apoyo. Partidos en los que se dan cita la mayor parte de los mejores jugadores de la NBA y que tendrá su próxima parada en Oklahoma.
La estrella local, Kevin Durant, y el mejor novato de la pasada temporada, Blake Griffin, han organizado su particular All-Star, que se jugará el próximo 23 de octubre en el Cox Convention Center de Oklahoma y que contará con la participación de jugadores como LeBron James, Carmelo Anthony o Chris Paul. Durant, por su parte intentará convencer a sus compañeros, Russell Westbrook y James Harden, para que participen en el choque.
El ex jugador de los Thunder, Desmond Mason, es otro de los organizadores del evento. “Es lo mejor que se puede hacer ahora. Es nuestra propia versión del All Star”, declaró Mason a la prensa local de Oklahoma, recordando además que es una oportunidad única para los aficionados de esta ciudad de ver a tantas estrellas juntas en la cancha.
David Stern ya ha comentado en más de una ocasión que Oklahoma, un mercado pequeño para la NBA, no cuenta con la infraestructura suficiente como para albergar un All-Star, por lo que este encuentro se presenta como una gran oportunidad para los habitantes de la ciudad de disfrutar de un evento de estas características. Además, todo lo que se recaude en la taquilla (las entradas costarán entre 29 y 199 dólares) irá destinado a obras de caridad.
Fuente: diario Marca
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