Por Andy Kamenetzky
ESPNLosAngeles.com
Durante sus 19 años de carrera en la NBA, Shaquille O'Neal
nunca fue tímido a la hora de criticar a sus compañeros o a las
leyendas ya retiradas desde hace tiempo. Por lo tanto, no debería
sorprender que en "Shaq Uncut: My Story", un nuevo libro en coautoría
con la analista de ESPN y columnista de ESPNBoston.com Jackie MacMullan
que saldrá el 15 de noviembre, contenga más de lo mismo.
En extractos puestos a disposición de los medios de comunicación, sus ex compañeros de equipo y miembros del Salón de la Fama se encuentran una vez más en la mira de O'Neal.
Según O'Neal, en el 2003 su ex compañero Kobe Bryant desobedeció una directiva del cuerpo técnico de dejar de criticarse entre sí públicamente. En cambio, rápidamente hizo una entrevista con el entonces reportero de ESPN Jim Gray y cuestionó la salud del centro y la gravedad de una lesión persistente en el pie.
Con las tensiones ya altas debido a la causa de acoso sexual de Bryant y la situación contractual incierta de O'Neal, ambos estallaron en contra del otro y una relación volátil se hizo aún peor. O'Neal también afirma que Bryant se quejó ante el entonces gerente general Jerry West por novatadas excesivas.
En el 2008, O'Neal recuerda un estallido durante una práctica con el entrenador de aquel entonces, Pat Riley, cuando ambos casi se van a las manos. Como resultado, dice él, "Mi boleto de salida de Miami quedó sellado".
O'Neal y LeBron James fueron compañeros durante la última temporada de James en Cleveland mientras se arremolinaban los temores sobre su salida. O'Neal afirma que, como resultado, la organización mimaba a James al no permitir que se lo criticara.
O'Neal también tiene problemas con Kareem Abdul-Jabbar. Los dos podrán compartir linaje entre los grandes centros de los Lakers, pero en los ojos de Shaq, el centro mayor se mostró renuente a ofrecerle cualquier tipo de consejo.
"Kareem no estaba nunca. Y cuando sí lo veía, él solía ignorarme. Lo decepcionante para mí fue que estando en Los Ángeles todos esos años y tratando de llenar esos zapatos, me hubiera gustado tener una conversación con él...
"Me decía hola, pero yo estaba buscando algo más, como, 'Oye, has esto' o 'Cuidado con aquello'. Él sabía que todo el mundo me comparaba con él. Sabía mejor que nadie lo que me esperaba, pero no me dio nada".
Abdul-Jabbar respondió a estas críticas con un post en su página personal de Facebook.
"Fui a LSU y trabajé con Shaq en los fundamentos del Skyhook como un favor para el entrenador Dale Brown. Pasé tiempo con Shaq en el gimnasio y le di algunos ejercicios que podía usar para desarrollar el gancho. Pero cuando consulté con su entrenador, Dale Brown, me dijeron que el padre de Shaq le había dicho a su hijo que él no tenía necesidad de desarrollar un tiro de gancho y que lo único que necesitaba hacer... era clavar todo en el aro. El padre de Shaq creía que era tan poderoso físicamente que simplemente tenía que clavar todo y no preocuparse por desarrollar un tiro delicado como el Skyhook", escribió.
Abdul-Jabbar agregó: "Como profesional nunca me acerqué a Shaq porque pensaba que él era bastante exitoso clavando todo y supuse que no quería mi ayuda. Además, nunca estuve en el cuerpo técnico de ninguno de sus equipos. Nunca fue hostil con él y hablaba con él, pero Shaq estaba disfrutando de su éxito, haciéndolo a su manera. Nunca me preguntó qué pensaba yo de lo que él debería estar haciendo y nunca me buscó para algún tipo de instrucción, y yo respeté esa decisión.
"Si hubiera tenido alguna idea de que Shaq quería aprender de mí, habría estado feliz de trabajar con él, pero yo sólo recibí señales de que él sentía que lo estaba haciendo bien y que no necesitaba o quería mi ayuda. Estoy realmente sorprendido por los comentarios de Shaq ya que traté de respetar su privacidad y nunca tuve ningún indicio de alguien de que él quería o necesitaba mis consejos con respecto a cómo él jugaba. Shaq tuvo una gran carrera, y yo, como todos los demás, respeto lo que ha logrado".
ESPNLosAngeles.com
AP
En extractos puestos a disposición de los medios de comunicación, sus ex compañeros de equipo y miembros del Salón de la Fama se encuentran una vez más en la mira de O'Neal.
Según O'Neal, en el 2003 su ex compañero Kobe Bryant desobedeció una directiva del cuerpo técnico de dejar de criticarse entre sí públicamente. En cambio, rápidamente hizo una entrevista con el entonces reportero de ESPN Jim Gray y cuestionó la salud del centro y la gravedad de una lesión persistente en el pie.
Con las tensiones ya altas debido a la causa de acoso sexual de Bryant y la situación contractual incierta de O'Neal, ambos estallaron en contra del otro y una relación volátil se hizo aún peor. O'Neal también afirma que Bryant se quejó ante el entonces gerente general Jerry West por novatadas excesivas.
En el 2008, O'Neal recuerda un estallido durante una práctica con el entrenador de aquel entonces, Pat Riley, cuando ambos casi se van a las manos. Como resultado, dice él, "Mi boleto de salida de Miami quedó sellado".
O'Neal y LeBron James fueron compañeros durante la última temporada de James en Cleveland mientras se arremolinaban los temores sobre su salida. O'Neal afirma que, como resultado, la organización mimaba a James al no permitir que se lo criticara.
O'Neal también tiene problemas con Kareem Abdul-Jabbar. Los dos podrán compartir linaje entre los grandes centros de los Lakers, pero en los ojos de Shaq, el centro mayor se mostró renuente a ofrecerle cualquier tipo de consejo.
"Kareem no estaba nunca. Y cuando sí lo veía, él solía ignorarme. Lo decepcionante para mí fue que estando en Los Ángeles todos esos años y tratando de llenar esos zapatos, me hubiera gustado tener una conversación con él...
"Me decía hola, pero yo estaba buscando algo más, como, 'Oye, has esto' o 'Cuidado con aquello'. Él sabía que todo el mundo me comparaba con él. Sabía mejor que nadie lo que me esperaba, pero no me dio nada".
Abdul-Jabbar respondió a estas críticas con un post en su página personal de Facebook.
"Fui a LSU y trabajé con Shaq en los fundamentos del Skyhook como un favor para el entrenador Dale Brown. Pasé tiempo con Shaq en el gimnasio y le di algunos ejercicios que podía usar para desarrollar el gancho. Pero cuando consulté con su entrenador, Dale Brown, me dijeron que el padre de Shaq le había dicho a su hijo que él no tenía necesidad de desarrollar un tiro de gancho y que lo único que necesitaba hacer... era clavar todo en el aro. El padre de Shaq creía que era tan poderoso físicamente que simplemente tenía que clavar todo y no preocuparse por desarrollar un tiro delicado como el Skyhook", escribió.
Abdul-Jabbar agregó: "Como profesional nunca me acerqué a Shaq porque pensaba que él era bastante exitoso clavando todo y supuse que no quería mi ayuda. Además, nunca estuve en el cuerpo técnico de ninguno de sus equipos. Nunca fue hostil con él y hablaba con él, pero Shaq estaba disfrutando de su éxito, haciéndolo a su manera. Nunca me preguntó qué pensaba yo de lo que él debería estar haciendo y nunca me buscó para algún tipo de instrucción, y yo respeté esa decisión.
"Si hubiera tenido alguna idea de que Shaq quería aprender de mí, habría estado feliz de trabajar con él, pero yo sólo recibí señales de que él sentía que lo estaba haciendo bien y que no necesitaba o quería mi ayuda. Estoy realmente sorprendido por los comentarios de Shaq ya que traté de respetar su privacidad y nunca tuve ningún indicio de alguien de que él quería o necesitaba mis consejos con respecto a cómo él jugaba. Shaq tuvo una gran carrera, y yo, como todos los demás, respeto lo que ha logrado".
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