Barea, de 27 años, tuvo una estelar postemporada al ser pieza clave en el campeonato que ganaron los Mavs, especialmente en la serie de segunda ronda con los Lakers de Los Angeles. Terminó el año promediando 8.9 puntos, 3.4 asistencias y un 42% en sus canastos de tres puntos.
El nuevo entrenador de los Wolves, Rick Adelman, dijo al diario Minneapolis Star-Tribune que interesa un tercer armador que haga juego con Ricky Rubio y Luke Ridnour tras añadir al tirador Bonzi Wells a su plantilla. Barea también sería clave para ayudar a Rubio a transicionar a la NBA en esta su primera temporada desde que vino de España.
Por otro lado, los Knicks, que ayer sábado firmaron al también armador Mike Bibby, interesan los servicios de Barea tras haber enviado a su armador suplente, Andy Rautins, a los Washington Wizards en el cambio que trajo a Tyson Chandler a Nueva York.
Sin embargo, los Knicks, que también han estado mirando al también puertorriqueño Carlos Arroyo, tienen unas limitaciones en su tope salarial, por lo que estaría limitados a hacer una oferta que no sobrepase los $2.5 millones por temporada. Barea ganó $1.8 millones con Dallas la temporada pasada.
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