SANTO
DOMINGO. En lo económico, Sammy Mejía logró el mayor enceste de su
carrera cuando aceptó la oferta que le hizo el equipo ruso CSKA de Moscú
el verano pasado para dejar la primera división francesa, donde fue
escogido Jugador Más Valioso la pasada campaña.
En lo que a tiempo de juego y
desarrollo se refiere, las cosas no han comenzado como el base
newyorkino, hijo de una pareja dominicana, quería.
Mejía, quien llegó al equipo
para ocupar el puesto dejado por Trajan Langdon, ha estado relegado a la
banca, tanto en los torneos domésticos que ha disputado el quinteto con
la nómina más alta del Viejo Continente como en la Euroliga.